4 Simuladores Online Que Parecen Reales

El navegador web es algo más que una forma de ver los sitios web. La tecnología web ha crecido hasta el punto de que un complejo software puede ejecutarse directamente en tu navegador. Lo que significa que hay algunos simuladores basados en la web bastante sorprendentes en los que puedes hacer clic ahora mismo desde cualquier dispositivo con un navegador compatible.

Los cinco simuladores en línea que te presentamos a continuación utilizan lo último en animación web, gráficos 3D y tecnología de aplicaciones web para ofrecer en tu pantalla algo para lo que hace treinta años habrías necesitado un superordenador. Así que, ¿por qué no dejar de lado la realidad por un rato y pasar un rato explorando una de estas simulaciones?

Simulador de vuelo GEO-FS

Hacía tiempo que no salía al mercado ningún simulador de vuelo decente. Microsoft está preparando algo especial con Microsoft Flight Simulator 2020 , pero ¿qué pasa si te apetece subirte a un avión virtual y volar un poco por el mundo?

Ahí es donde entra en escena GEO-FS. Se trata de un increíble simulador de vuelo online con 20 aviones diferentes, 30.000 pistas de aterrizaje y un terreno global sobre el que volar. Lo más impresionante es cómo GEO-FS introduce información del mundo real en la simulación.

Verás el tráfico aéreo comercial real, las condiciones meteorológicas en tiempo real y a otros jugadores volando en este enorme simulador multijugador. Seguro que hay simuladores de vuelo más bonitos en lo que respecta a los gráficos, pero GEO-FS presta una atención asombrosa a los detalles en áreas que otros simuladores simplemente no tocan, y se ejecuta en su navegador.

Google Earth

Google Earth, por supuesto, también está disponible como aplicación descargable. Sin embargo, si utilizas el navegador Chrome, puedes iniciar Google Earth en una pestaña del navegador en cuestión de segundos. Dependiendo de tu velocidad de Internet, por supuesto.

Google ha hecho mucho por este software infravalorado a lo largo de los años. Es, con mucho, la mejor manera de explorar nuestro planeta sin problemas. Puedes girar el globo terráqueo con un clic del ratón, verlo desde el espacio y luego reducirlo hasta el nivel del suelo. Accede a representaciones en 3D increíblemente detalladas de la superficie, tarjetas de conocimiento, visitas guiadas y mucho más...

Sinceramente, esto facilita mucho el trabajo de los profesores. Es increíble que Google lo ofrezca gratuitamente.

Solar System Scope

Aunque Google Maps ha añadido recientemente otros planetas además de la Tierra a su colección, ni éste ni Google Earth ofrecen un modelo completo de nuestro sistema solar. En realidad, hay bastantes simulaciones en línea decentes de nuestro sistema solar. Así que, en cierto modo, hay mucho donde elegir cuando se trata de hacer un viaje por nuestro patio trasero espacial.

Nos gusta una aplicación de simulador online llamada Solar System Scope, que realmente tiene uno de los modelos más bonitos y suaves para ejecutar en un navegador. Estos chicos llevan tiempo trabajando en visualizaciones de eventos espaciales. Encontrarás toda una biblioteca de animaciones muy cuidadas hechas en Flash, que obviamente ya está obsoleto, pero que sigue siendo bastante bueno.

La principal atracción es el nuevo modelo 3D real. Por defecto tiene algunas exageraciones, pero si profundizas en los ajustes puedes activar y desactivar tamaños relativos realistas, lunas y otros detalles. También puedes fijar cualquier fecha y hora para ver las posiciones correctas de todos los cuerpos celestes, pasados o futuros.

A pesar de su nombre, Solar System Scope ofrece en realidad una visión que va mucho más allá de nuestro espacio local. Puedes alejar el zoom para echar un vistazo a nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, con algunos detalles sobre lugares de interés en el camino.

Sin embargo, Solar System Scope brilla principalmente cuando juega con los ocho planetas que todos conocemos y amamos.

PhET Physics Simulators

Los simuladores en línea que parecen reales no se limitan a los gráficos de aspecto realista. Estos simuladores educativos de física son de dibujos animados y no pretenden parecerse a los reales. De hecho, muchas de las cosas que simulan estas aplicaciones de simulación interactiva son teóricas, microscópicas e incluso subatómicas.

Lo que parece real en estas simulaciones es la matemática que hay detrás. Puedes jugar con las variables y ver cuál sería el efecto en la vida real. Todo ello sin necesidad de montar un experimento ni de disponer de un equipo de laboratorio real.

La mayoría de los simuladores de la colección pueden ejecutarse en el navegador. Sólo tienes que tener en cuenta que no todos son HTML 5, por lo que es posible que tengas que activar flash para que funcionen. Con esta pequeña advertencia, este es probablemente el mejor lugar para obtener simulaciones educativas para las ciencias.

Bonus: SimCity 2000

Vale, esto último puede ser un poco tramposo, ya que se trata literalmente del SimCity 2000 original ejecutado en un navegador. Aun así, piensa en lo que esto significa. Uno de los mejores juegos clásicos de simulador de ciudades puede jugarse ahora en su forma original de DOS, en tu navegador en cuestión de segundos. Sólo tienes que hacer clic en el enlace de arriba y en un minuto estarás construyendo tu ciudad.

Es un auténtico emulador de DOS para PC que se ejecuta en tu navegador. Así que estás jugando a un simulador en una (especie de) simulación de un sistema informático antiguo. Se siente como si fuera real.

Es una sim-cepción, pero no es menos divertido que lo que siempre ha sido. Si puedes soportar los anuncios, Play Classic también tiene muchos otros títulos antiguos, así que puedes fingir que son los años 90 de nuevo y que estás arrancando tu viejo PC Pentium.

¿Es esto la vida real? ¿O es sólo una fantasía?

La simulación puede ser divertida, educativa y útil. Así que es bueno que no necesites acceso a un edificio informático universitario para jugar con estas estupendas representaciones virtuales del mundo real.

Estos simuladores en línea son un testimonio de lo lejos que ha llegado la tecnología de consumo, con dispositivos en la palma de la mano o acurrucados en el regazo, aprovechando el poder aparentemente infinito de Internet.